Mundo: 20 Razones para un cristiano oponerse a las guerras

Por Roberto Torres Collazo
Editor Asociado de Cambio Social, EE.UU.

Hay muchos líderes religiosos e iglesias cristianas que apoyan las guerras basandose en textos bíblicos violentos del Antiguo Testamento (AT) sin tomar en consideración el método histórico-crítico, en argumentos no inspirados en el Evangelio y sin fundamentos en hechos. Como veremos los cristianos no podemos apoyar las guerras, bendecir tropas, orar por soldados y en las bases militares no deben tener capellanes. Este tema es muy importante porque se juega la vida y la muerte de millones de personas. Nos oponemos a las guerras porque:

1. Las armas son para matar a nuestros semejantes. Siempre mueren niños, mujeres, ancianos y discapacitados. No son “daños colaterales”, son asesinatos colaterales. Se mutila personas, se tortura, se viola mujeres, produce epidemias, desplazamientos y refugiados, pobreza, hambre y afecta gravemente la salud mental. Crean enorme sufrimientos y dolores. El Génesis 1,26 declara que Dios dijo: “Hagamos el ser humano a imagen y semejanza”

2. Las guerras destruyen viviendas, escuelas, lugares de trabajo, hospitales, parques, vías de transporte, sistemas de gas, luz y agua.

3. Alteran el ambiente y el clima, asesina la naturaleza, los animales, los microorganismos y los eco-sistemas. Es asesinada la creación de Dios.

4. Creemos en el Prícipe de la Paz. Según el relato de Lucas 2, 14, este fué el primer anuncio de los ángeles a los pastores cuando nació Jesús de Nazaret: “'Gloria a Dios en lo más alto del cielo y en la tierra paz a los seres humanos”.

5. Porque Dios no quiere las guerras. Un Dios de amor, perdón, compasión y justicia que nos mostró Jesús es contrario a baños de sangre, asesinatos y masacres.

6. El poder destructor actualmente es tan poderoso tecnologica y tan frecuentemente desproporcionado en su uso, legal e ilegal, nos dice que no hay “guerras justas”, ni “ guerras buenas”. Recordemos las armas químicas y las bombas de racimo que pese a estar prohibidas por tratados internacionales se han usado.

7. Jesús de Nazaret dijo: “Bienaventurado los que luchan por la paz” Mateo 5,9.

8. Por que el Maestro nunca ordenó y animó a matar.

9. Las guerras suelen estar acompañadas de odio, venganza, racismo y deshumanización hacia el presunto enemigo. Anti-valores opuestos al Reino de Dios y su justicia.

10. La o el seguidor de Jesús de Nazaret, implica ser pacifista como el Maestro.

11. Los cristianos no creemos en la vieja ley del Antiguo Testamento: “Ojo por ojo y por diente por diente” Levítico 24,20 porque así no nos enseñó el Mesías. Nos enseñó: “No resistan al malvado. Antes bien, si alguien te golpea en la mejilla derecha, ofrécele también la otra” Mateo 5.39. Martín L. King y Mahatma Gandhi, entre muchos otros, han desmostrado que los métodos no-violentos son posible para resolver los conflictos. Como dijo Gandhi: “Ojo por ojo y diente por diente y nos quedamos todos sin ojos y sin dientes”.

12. El Profeta nos enseñó con su vida a amar a nuestros enemigos: “Ustedes ha oido que se dijo (AT): 'Amarás a tu prójimo y no harás amistad con tu enemigo'. Pero yo les digo: Amen a sus enemigos y recen por sus seguidores para que así sean hijos de su Padre que está en los cielos” Mateo 43-45.

13. Jesús reprendió a sus seguidores por desear la violencia sobre los samaritanos por no querer recibirlo a él: “Al ver esto sus díscipulos Santiago y Juan, le preguntaron: 'Señor, ¿quieres que mandemos a bajar fuego del cielo que los consuma?. Pero Jesús se volvió y los reprendió” Lucas 9,51-55.

14. El cristiano no va a la guerra por obedecer gobiernos: “Hay que obedecer a Dios ante que a los hombres” Acts 5,29. Este pasaje se contrapone al de Romanos 13,1-2: “Cada uno debe someterse a las autoridades... porque el que se opone a la autoridad se rebela contra Dios”. Si fueramos a tomar éste texto al pié de la letra tendríamos que preguntarnos: ¿Había que obedecer al ex-presidente Bush cuando invadió Irak con la mentira de que había armas de destrucción masiva? ¿Habría que obedecer a Hitler? ¿Habría que obedecer a los dictadores que llegaron al poder por votos o golpes de Estados militares o tecnicismos jurídicos?.

15. El cristiano y todo el mundo lo sabe, que la violencia engendra violencia. Muestra de esto es la supuesta lucha contra el terrorismo, que no ha disminuido el terrorismo y en cambio han aumentado las respuestas terroristas.

16. Jesús terminó con la imagen de un Dios violento, de acuerdo al teólogo José María Castillo : “El Dios de la Biblia es, con frecuencia, es Dios violento. En cerca de mil pasajes, la Biblia habla de la ira de Dios, que castiga con la muerte y la ruina. Jesús acaba con esa imagen de Dios mediante esta parábola” (cuento). Se refiere a la parábola del Hijo Pródigo. Ver: “La Religión de Jesús” comentario diario del Evangelio 2016-2017. Ciclo A, por José M. Castillo.

17. Como dice la sabiduría popular: “La verdad es hija de Dios”. Y todos tenemos derecho a saber la verdad. La realidad es que en la guerra la verdad es la primera que muere, como dice el veterano corresponsal de guerra Robert Fisk. Muchas inmoralidades y crímenes de guerra no salen a luz pública en los medios de comunicación comercial.

18. Las guerras hacen más millonario a los millonarios del complejo militar y le recorta fondos a los pobres y los mata. El Profeta tuvo preferencia por los pobres y como dijo el mártir y obispo Oscar A. Romero: “La Gloria de Dios es que el pobre viva”.

19. .Nos dice el Evangelio en Juan 8,1-11 que tomaron una mujer en adulterio que era podía ser lapidada pero Jesús demostró su compasión y se opuso a que la lapidaran.

20. Cuando fué Jesús arrestado Pedro tomó una espada y le cortó la oreja a uno de los guardias y él le dijo que guardara la espada. Y curó al guardia.


El cristiano no puede ser indiferente a la guerra por cuanto la Biblia no es indiferente a la violencia. El cristiano debe seguir el ejemplo del Maestro Jesús, por esto no puede apoyar las guerras. Tampoco puede ayudar las tropas, los capellanes no deben respaldar los soldados, ni participar en celebraciones militares y apoyar los gobiernos. Porque la guerra es incompatible con el Evangelio de Jesús y la realidad actual de las guerras. Los textos bíblicos que justifican la guerra no resisten el método histórico-crítico y los hechos. Apostamos por la no-violencia activa, el diálogo, la diplomacia, la solución política, el fortalecimientos de las organizaciones pacifistas y las negociaciones y unido todo esto a la oración. Para saber más ver la colección de ensayos “Cristianity And War” [Cristianismo y Guerra] del Dr. Laurence M. Vance (2008, 2da. edición).