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MUNDIAL

Las cruces de la mujer palestina

Roberto Torres Collazo
Editor asociado del colectivo de Cambio Social, Massachusetts, EEUU.
27 de Febrero de 2015

Hace más de 67 años las mujeres palestinas siguen sufriendo abusos y la negación de sus derechos básicos a manos de colonos y soldados israelíes en los territorios ocupados. Palestinas que siguen siendo sometidas a sufrimientos y agresiones que les conducen a intensos estados de angustias, depresiones y a extrema pobreza. Una de las causas fundamentales son las muertes y desapariciones de sus hijos, hermanas, esposos o padres.

No hay mujer en Gaza o Cirjordania, que no tenga un esposo o hijo que haya sido asesinado por el ejército o esté en prisiones israelíes. Sus viviendas han sido literalmente destruidas, son humilladas en los puestos de control, falta de sanidad, sus vidas son un infierno como acertadamente señala la periodista y escritora Mercé Rivas Torres. La mayoría de ellas al ser madres solteras llevan la carga pesada del sustento económico del grupo familiar, el cuidado de los niños, enfermos y ancianos. Y más difícil aún cuando apenas hay fuentes de empleo. No es de extrañar que la Organización de la Naciones Unidas haya declarado que las mujeres “Constituyen la mayoría de los enfermos mentales debidos a las presiones y tensiones de sus vidas”.

La desnutrición es crónica, esto hace que pierdan más de la mitad de sus hijos al nacer. La situación es también muy complicada en los campos de refugiados palestinos en el Líbano, Jordania en particular en Siria donde ronda el grupo terrorista autodenominado “Estado Islámico” (EL). Otra cruz de la mujeres palestinas son las prisioneras políticas en las cárceles israelíes de Telmond, Ramleh y Haifa. Son tratadas sin ningun tipo de respeto. Aveces son torturas. Las organizaciones humanitarias como Amnistía Internacional han denunciado que viven en condiciones deshumanizante debido al hacinamiento de las celdas, escasez de comida, falta de luz e higiene y restriciones que impiden asesoramiento legal y comunicarse con sus familiares.

La Cruz Roja Internacional ha denunciado el mal trato hacia las mujeres prisioneras. Cuando estas estan a punto de dar a luz son llevadas al hospital encadenadas de pies y manos como si fueran criminales. Sus familiares y amigos no pueden libremente visitarlas o asistirlas, necesitan un permiso específico que es muy difícil de conseguir.

Las mujeres palestinas como mensionamos antes sufren depresiones, angustias y también sufren de insomnio, ansiedad, irritabilidad y en el caso de los hijos incontinencia urinaria, fracasos escolares y agresividad. Esta agresividad suele afectar a todos los miembros de la familia debido al intenso estrés.

Debido al calvario a que son sometidas en su desespero ha aumentado dramaticamente la prostitución según la Oficina de Estadísticas de Palestina. No hay legislación israelí ni palestina que las proteja de los violadores o abusadores.

Este genocidio del régimen de Israel, apoyado por el gobierno de EEUU, hace de la mujeres su principal blanco de ataque porque son las que paren las siguientes generaciones. Esas cruces de las mujeres palestinas es un tema que muy poco se menciona. Cruces que abarcan millones de palestinas pobres que es generalmente silenciado por los medios de comunicación, los dirigentes políticos, los líderes religiosos, los tribunales y la comunidad internacional.

¿Qué se puede hacer?. Para muchos puede ser un problema lejano, pero aún así se pueden hacer muchas cosas como denunciar publicamente el proyecto colonizador israelí y muy importante, en el plano colectivo también hay organizaciones humanitarias, ascesibles en Internet, que podemos apoyar o podemos participar en movimientos solidarios por las mujeres de Palestinas para al menos aliviar sus sufrimientos y dolores.