MUNDIALEl fundamentalismo religioso es peligrosoPor Roberto Torres Collazo
Editor del colectivo Cambio Social, EE.UU
20 de Junio de 2020
En Guatemala el 6 de junio fue quemado vivo Don Domingo Choc a manos de un grupo de pentecostales fundamentalistas acusado de “brujo” cuando en realidad era un Guía Espiritual y médico Maya. También era integrante de equipos de investigación científica sobre plantas medicinales. Un crimen repudiable. El fundamentalismo a matado de manera similar en Texas, EE.UU bajo David Koresh, en Guyana Jim Jomes y en muchos otros lugares en el pasado y presente. Este tema es importante porque impacta negativamente directa e indirectamente a millones de personas.
Es deseable aclarar que también han habido y hay sectores católicos, budistas, hindués, musulmanes y judíos fundamentalistas. En Latinoamerica y el Caribe las iglesias fundamentalistas protestantes cristianas han ganado rápidamente adeptos. Veamos algunos de sus rasgos generales.
Hay varios tipos de fundamentalismo: militar, político, nacionalista, económico y religioso. De este último nos ocuparemos. En el cristianismo el fundamentalismo bíblico es aquel que donde cada letra, coma, cada palabra, cada acento todo vale igual. Todo es tomado al pie de la letra, no toma en cuenta los géneros literarios de la Biblia y el método histórico-crítico.
Basandose en la Biblia, el Covid-19 es un castigo de Dios, los desastres naturales son castigo de Dios, si tienes un trastorno mental, es un espíritu malo, si eres ateo vas para el infierno, todo forzando los textos bíblicos a hablar como un torturador que obliga a su víctima a darle información. Debido a su interpretación literal de la Biblia en sus mensajes destacan el presunto fin del mundo. De acuerdo los científicos Brian Swimme y Thomas Berry hace más de mil millones de años antes de la aparición del ser humano en la Tierra hubo varias extinciones de vida animal y vegetal y el mundo no terminó. También los fundamentalistas en la actualidad pronostican todos los años el fin del mundo.
Las sectas protestantes fundamentalistas llegan a Latinoamérica y el Caribe desde Estados Unidos y una vez establecidos compran espacios costosos en la Prensa y algunos se aprovechan económicamente de sus miembros. También algunas reciben financiamiento desde el imperio. Hasta los presidentes Bolsonaro de Brasil, Piñera de Chile, la autodeclarada presidenta Añez de Bolivia y Trump se han subido al tren, que le han favorecido en votos y astronómicas donaciones financieras a sus campañas políticas.
Es frecuente que sus líderes carezcan de formación teológica profesional, de aquí que cualquiera pueda ser pastor o pastora. Es típico que las sectas se desarrollen en barrios pobres. En pocos meses construyen una iglesia en un garaje o una marquesina. Y de acuerdo a Harvey Cox, las Mega-Iglesias de las grandes ciudades, se parecen y funcionan más como shopping centers que como iglesias. Sus representantes suelen ser intelectualmente agresivos cuando se trata de dialogar con ellos, no escuchan, se creen, en la práctica, los dueños de la verdad: “No hay mas que una verdad, la que él posee” (p.91) anota Herbert Shleichert.
En materia moral, usualmente son ultraconservadores. Rechazan la “ideología de género” (si tal cosa existe) están contra el aborto, defienden el patriarcado, son enemigos del matrimonio igualitario, en estos temas son intolerantes e intransigentes. La ciencia y la filosofía no tienen cabida en los ambientes fundamentalistas y miran la modernidad con desconfianza, porque el “diablo” está engañando a muchos. Generalmente no les interesa la opresión, el racismo, el coloniaje y la lucha de clases. En sus cultos se explota las emociones de la gente mediante el uso de la tecnología, gritando, usando luces sicodélicas como si fuera un club nocturno, música escandalosa como si Dios fuera sordo. Hay lugares donde los vecinos no pueden dormir.
Todo lo anterior muestra que el fundamentalismo religioso es peligroso, porque ha matado y puede seguir matando, es intolerante, intransigente, se creen los dueños de la verdad, sus líderes generalmente carecen de formación teológica profesional, tienden a rechazar a los que no piensan como ellos, repudian los homosexuales, los textos bíblicos los toman todos literalmente, son anti-científicos, en sus prédicas no les interesa la opresión, usan las plataformas políticas partidistas para imponer sus agendas moralistas y en ocasiones se aprovechan financieramente de la gente o son financiados desde EE.UU. Va contra la sana convivencia, la tolerancia, el respeto, la democracia y la diversidad. Hay que combatir todo tipo de fundamentalismo, respetando siempre la dignidad humana de las personas.
Referencias
Cox, H., (2016). The market as God. Editorial Harvard University: Massachusetts, US.
Morales, R., (Diciembre, 2019). No estamos de acuerdo con que se use el nombre de Dios para matar o para imponer verdades. Ponencia en taller realizado en el Instituto de Filosofía de la Habana, Cuba. Portal: Rebelión.
Tamayo, J.J., (2004). Fundamentalismos: y diálogo entre religiones. Editorial Trotta: Madrid.
Sabater, V., (Diciembre, 2019). En el combate contra el fundamentalismo tenemos que estar todos. Ponencia en taller realizado en el Instituto de Filosofía de la Habana, Cuba. Portal: Rebelión.
Schleichert, H., (2006). Cómo discutir con un fundamentalista sin perder la razón. Editorial Siglo XXI: Madrid.
Swimme, B., & Berry, T., (1992). La historia del universo. Editorial Uriel Satori: Argentina.
Torres, C. R. (Noviembre,2019). Los falsos gurús. Portal: LFSC.
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